Mezquita de Granada
Imam: Sheij Muhammad Al Kassbi
Alhamdulillah.
Musulmanes, os exhorto a que tengáis Taqwa de Allah; la mejor provisión que puede obtener el ser humano en este mundo de Dunia, lo mejor que puede llevarse a la tumba y lo mejor con lo que prepararse para el encuentro con Su Señor es la Taqwa de Allah y las buenas obras. Por el contrario lo peor que puede llevar consigo el ser humano al momento de la Rendición de Cuentas es el shirk y la injusticia.
Dice Allah en Su Libro: “Todos los rostros se humillarán ante el Viviente, el Sustentador, y habrá perdido quien lleve injusticia. Pero quien practique las acciones de rectitud y sea creyente que no tema injusticia ni menoscabo”. (Taha, 108)
Esta aleya nos habla de uno de los estados del Día del Levantamiento, en el que lo que nos librará de la angustia y la dificultad en ese duro Día es el Imán y las acciones rectas. La perdición y el castigo será para los injustos en dunia y en ajira.
La injusticia conduce a la ira de Allah, a la corrupción de este mundo y sus integrantes y ciertamente la injusticia es un signo de la oscuridad y dureza del corazón.
La injusticia es de diferentes tipos, la injusticia que el comete con Su Señor, que en su grado más elevado y despectivo es el shirk, la asociación. Dice Allah: “No asocies a nada ni nadie con Allah, pues hacerlo es una enorme injusticia”. (Luqman, 12)
También está la injusticia que cometen los siervos entre ellos, el Mensajero al que Allah colme de bendiciones dijo: “¿Sabéis quién es el arruinado?”. Dijeron: “El arruinado para nosotros es quien no tiene ni dirhams ni bienes”. Dijo S.A.W.S.: “El arruinado de mi ummah es el que acuda el Día del Levantamiento con Salat, zakat y ayuno, y acuda habiendo insultado a este, calumniando a este otro, habiendo robado a este, habiendo derramado la sangre de este, habiendo golpeado al otro… entonces se le quitaran de sus buenas acciones para reponer el mal que ha hecho, y si se agotan sus buenas obras antes de reponer el mal, se tomarán las malas acciones de los otros, se le arrojarán encima y luego será arrojado al Fuego”.
También existe la injusticia que comete el siervo consigo mismo, y esto es poniendo en práctica lo prohibido y siendo negligente con las obligaciones impuestas por Allah. Todo el que rebaja las obligaciones de Allah, todo el que transgrede los límites de Allah está siendo injusto consigo mismo.
Hay muchas causas que llevan a la persona a ser injusta, a tratar a otros injustamente hasta tal punto que termina amando la injusticia. Una de estas causas es el Shaytán, por eso Allah nos advierte continuamente en Su Libro sobre las causa de seguir a Shaytán cuando dice: “No sigáis los pasos de Shaytán, ciertamente es para vosotros un enemigo acérrimo”. (Baqara, 208)
Otra causa es el propio nafs, o seguir las pasiones y apetitos y entregarte a ellos. Dice Allah: “Es cierto que el alma ordena insistentemente el mal”. Y sobre los apetitos y las pasiones dice Allah: “Pero quien temió que habría de compadecer ante Su Señor y refrenó su alma del deseo tendrá como morada el Jardín”.
Amar el poder, amar este mundo de dunia, amar una posición social, amar el reconocimiento de la gente, todo esto son causas de poner en práctica la injusticia.
Uno de los asuntos que ayudan al siervo a alejarse de la injusticia, es conocer que Allah se ha prohibido a si mismo ser injusto, y ya que Allah que nos ha creado no lo es, ¿por qué habíamos de serlo nosotros? Dice Allah: “Allah no es injusto ni en el peso de lo más pequeño”. (Nisa, 40).
También ayuda al siervo observar y reflexionar en el castigo, en el final de los que han sido injustos a lo largo de los siglos. “Y Tu Señor no iba a destruir una ciudad a causa de ninguna injusticia mientras sus habitantes fueran de los que ponen orden”. (Hud, 117).
Otra ayuda es no desesperar jamás de la Misericordia de Allah, también tener presente el Día de la Rendición de Cuentas. Dice Allah: “Brillará la tierra con la luz de Tu Señor, se colocará el Libro, se hará venir a los Profetas y a los testigos y se juzgará entre ellos sin que sufran injusticia”. (Zumar, 68)
El Jalifa Umar Ibn Abdul Asis, que Allah esté complacido con ambos, escribía a sus emires diciéndoles: “Si sientes que eres poderoso y que ese poder te lleva a tratar a la gente injustamente, recuerda el Poder que tiene Allah sobre ti”.
Otro de los asuntos que alejan al siervo de la injusticia es la abundancia en el recuerdo de Allah y pedir constantemente Su Perdón. Dice Allah: “Aquellos que cuando cometen una indecencia o son injustos consigo mismo, recuerdan a Allah y piden Perdón por sus faltas, porque ¿Quién perdona las faltas sino Allah? Y no persisten en lo que hicieron después de saberlo”. (Ali Imran, 135)
Oh Allah te pedimos que nos hagas ser de los justos y alejes de nosotros la injusticia.
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Musulmanes, ciertamente la injusticia que comete el ser humano va elevándose en grados, cada vez más, hasta alcanzar su punto más álgido. Los grados más bajos y por lo que se comienza, es por la injusticia que cometen los padres con sus hijos, y la que cometen los hijos con sus padres. La injusticia del esposa con la esposa y viceversa. La injusticia entre los vecinos. La injusticia entre las comunidades de musulmanes. La injusticia entre gente de diferentes regiones o creencias. La injusticia entre sociedades y continúa elevando más y más su grado.
Tened temor de Allah siervos suyos, alejaos de la injusticia, pedid a Allah que os proteja de caer en ella, buscad los medios a través de los cuales podéis alejaros de llevarla a la práctica, sed justos entre vosotros, implantad la justicia en este tiempo, ya que realmente estamos necesitados de ella.
Wa salla Allahu ala Saydina Muhammad wa ‘ala alihi wa sahbihi wa sallam. Amín
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