Mezquita de Granada
Imam: Hafid Ahmed Bermejo
Musulmanes, os exhorto y a mi mismo a que tengáis Taqwa de Allah, ya que la Taqwa eleva el grado ante Allah y ante los hombres, es un remedio frente a la angustia y una protección ante los males y los apetitos.
Sabed que la vida de este mundo tiene sus pilares y sus raíces nobles sobre las que se basa, además de significados nobles y elevados. Y ciertamente una de estas cualidades, uno de estos pilares, es la noble cualidad de la misericordia, la rahma. La misericordia es una cualidad loable propia de un carácter noble. Es otorgada a los felices y negada a los miserables.
De Abu Huraira, que Allah esté complacido con él, que el Mensajero sallallahu alayhi wa sallam, dijo: "Ciertamente a Allah le pertenecen 100 misericordias, y de ellas ha hecho descender una sobre la tierra y gracias a la cual tienen misericordia las criaturas, hasta tal punto que el caballo y la camella levantan sus patas para no aplastar a su recién nacido. Y Allah ha mantenido junto a El otras 99 para el Día del Levantamiento". Ciertamente la misericordia es una de las cualidades de Allah, subhanahu wa ta’ala. El Creador ha declarado que la misericordia le pertenece a Él en virtud de su Grandeza y su Majestad.
La Misericordia es una cualidad inmensa que Allah ha creado para sus siervos y que el Islam ha confirmado. Y se ha hecho obligatorio para los musulmanes el impregnarse de ella, ya que el Din del Islam es el Din de la Misericordia. E implantarla es necesario para que la justicia, el bien, la esperanza y la realidad del Islam se propaguen sobre la tierra, para la correcta adoración del Creador de los cielos y la tierra y para combatir la falsedad e impedir el mal. Dice Allah, subhanahu wa ta’ala, en Su Libro, dirigiéndose a Su Profeta:
"Y no te hemos enviado sino como una misericordia para todos los mundos".
De Abdullah Ibn ‘Umar, que Allah esté complacido con ambos, que el Mensajero, sallallahu alayhi wa sallam, dijo: "Con lo misericordiosos, el Misericordioso es misericordioso. Tened misericordia con los que están en la tierra y tendrá misericordia con vosotros el que está en el cielo". (Rawahu Abu Dawud) Dijo Yabir Ibn Abdullah, que Allah esté complacido con él: Dijo el Mensajero, sallallahu alayhi wa sallam: "Quien no es misericordioso con la gente, Allah no será misericordioso con él”. (Rawahul Bujari wa Muslim) Y en un conocido hadiz relatado por Anu´man Ibn Bahir, dijo el Mensajero, al que Allah colme de bendiciones: "Los creyentes son, en cuanto al amor, la misericordia y la bondad entre ellos, como un (sólo) cuerpo: si algún miembro del mismo padece, todo el cuerpo siente fiebre y falta de sueño".
El Islam nos llama a ser misericordiosos con los pequeños, con los mayores, con los débiles. De Abdullah Ibn Abbas, que el Mensajero, sallallahu alayhi wa sallam, dijo: "No es de los nuestros quien no respeta al mayor, no es misericordioso con el menor, no ordena el bien y no prohíbe el mal". (Hadiz transmitido por Ahmad y At-Tirmidhi)
Ciertamente el Islam nos llama a implantar la misericordia en todas nuestras acciones y en todos nuestros tratos, incluso con los animales, ya que nuestro Din es el Din de la justicia. Y se nos ha ordenado a los creyentes poner en práctica la misericordia en todos sus grados y niveles.
Narró Abdullah Ibn Yafar, que Allah esté complacido con él: "El Mensajero entró en un huerto cercado que pertenecía a uno de los Ansar y se encontró con un camello. Cuando el camello vio al Profeta, sallallahu alayhi wa sallam, se puso a gemir y a llorar. El Profeta, sallallahu alayhi wa sallam, se acercó a él y pasó sus manos por la base de sus orejas y sus puntas, hasta que el camello se calló. El Profeta, sallallahu alayhi wa sallam, preguntó: “¿Quién es el dueño del camello? ¿De quién es este camello?” Un joven de los Ansar vino y le dijo: Es mío. El Profeta, sallallahu alayhi wa sallam, le dijo: “¿Por qué no temes a Allah en tu trato con esta bestia de la que Allah te ha hecho su dueño? Se me ha quejado de que lo dejas hambriento y lo cargas hasta agotarlo”.
Y As-Sharid, radiyallahu anhu dijo: “Escuché decir al Mensajero, sallallahu alayhi wa sallam: "Quien mate a un pájaro en vano, éste se presentará ante Allah el Día del Levantamiento y dirá: ‘¡Oh Señor!: Fulano me mató en vano y no lo hizo para obtener beneficio". (Rawahu An-Nisaai)
En todos estos casos tenemos ejemplos claros de la misericordia que hay que tener, no sólo con los seres humanos, sino con todas las criaturas de Allah.
Musulmanes, cuán necesitados estamos los seres humanos de estas nobles cualidades y de estos significados profundos a los que nos exhorta nuestro Din. Debemos impregnarnos de la noble cualidad de la misericordia que alivia toda dificultad y todo problema. Y nos lleva a respetar los derechos de los padres y de los cercanos, a proteger a los débiles y a los necesitados, a ayudar a los huérfanos y a los ancianos. Quien la pone en práctica estará protegido de los ataques, tanto de los musulmanes como de los que no lo son.
Y ciertamente que estamos necesitados de la misericordia en estos tiempos de oscuridad en los que la rahma escasea cada vez mas, ya que cada uno quiere imponer siempre su opinión y no escuchar ni consultar a los demás, y no buscan la verdad en el Libro de Allah ni en la Sunna de Su Mensajero, ni en la gente de conocimiento que les rodea.
Dice Allah en su Libro:
"¡Vosotros que creéis! Temed a Allah y hablad acertadamente. Él hará buenas vuestras acciones y os perdonará las faltas. Y quien obedece a Allah y a Su Mensajero ha triunfado con gran éxito". (Ahzab, 71)
A Allah le pedimos que nos dé la fuerza necesaria para poner en práctica la noble cualidad de la misericordia en todas nuestras relaciones con los seres humanos y el resto de las criaturas.
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Musulmanes, ciertamente la misericordia es el Ihsan (excelencia) en uno mismo que pone en práctica las obligaciones de Allah y se aleja de sus prohibiciones. Y el Ihsan con todas las criaturas, haciendo el bien en todo aquello que pueda beneficiarlas, además de cubrir los males y los errores. Y a quien posea estas cualidades, Allah, subhanahu wa ta’ala, lo cubrirá con Su misericordia, le abrirá las puertas del Jardín y le fortalecerá en todos sus estados.
Dice Allah en su Libro, en la Surat al 'Araf: "Mi misericordia abarca todas las cosas y la escribiré para los que sean temerosos, para los que entreguen el Zakat y para los que crean en Nuestros signos. Ésos que siguen al Mensajero, el Profeta iletrado, al que encuentran descrito en la Torá y en el Inyil, y que les ordena lo reconocido y les prohíbe lo reprobable, les hace lícitas las cosas buenas e ilícitas las malas y los libera de las cargas y de la cadenas que pesaban sobre ellos. Y aquellos que creen en él, le honran, le ayudan y siguen la luz que fue descendida con él; ésos son los afortunados". (Araf, 157)
Musulmanes, aferraos a la misericordia, pues ciertamente la vida en este mundo no es posible sin ella, y el primero que se beneficia es quien la pone en práctica. En un hadiz dijo el Mensajero, al que Allah colme de bendiciones: "Los habitantes del Jardín son tres: un Imam justo, un hombre de corazón misericordioso con los necesitados y con sus cercanos y un hombre pobre que lleva su pobre con dignidad" (Muslim)
Musulmanes, aplicad en vuestras vidas la misericordia, ponerla en práctica tanto durante el día como durante la noche, con vuestros padres, con vuestros hermanos, con vuestros seres más cercanos, con vuestros amigos, con vuestros compañeros de trabajo, con vuestros empleados, con todo aquel con el que tengáis algún tipo de relación, ya que si lo hacéis veréis los beneficios tanto en esta vida como en la próxima. Recordad la última aleya de la Surat al Fath, cuando dice Allah, subhanahu wa ta’ala, al describir a Su Mensajero y a sus compañeros: "Muhammad es el Mensajero de Allah, los que están con él son duros con los incrédulos y compasivos entre ellos" (Fath, 29)
Esta ha de ser nuestra forma de actuar; debemos imitar a los compañeros del Profeta y ser duros con los incrédulos. Pero esto no significa atacarles a las primeras de cambio, ni suicidarse para matar a uno o dos de ellos, sino que debemos ser duros e inflexibles a la hora de transmitirles nuestro Din, no debemos dejarnos amedrentar por ellos, ni sentirnos por debajo porque sabemos que nuestro Din es el Din correcto, que está por encima de todas las otras cosas, que es un auténtico regalo y que Allah recompensa a los que hacen el bien.
Y la aleya continúa diciendo: "y compasivos entre ellos". Los Sabaha eran compasivos, eran misericordiosos cuando se relacionaban entre sí. Y aquí no debemos equivocarnos, ya que hay ocasiones en las que ser misericordioso exige ser duro y firme y tener la valentía necesaria para decirle al compañero que está haciendo las cosas mal, que ese acto no es correcto dentro de los parámetros del Islam, que lo tiene que cambiar; pero eso sí, siempre dentro de los parámetros del Adab y la cortesía. Pero es importante que no lo olvidemos, que ser misericordioso no es siempre decirle al compañero que está haciendo las cosas bien, sino que debemos tener presente que la misericordia es a veces firmeza y rectitud, tanto para los asuntos que nos agradan como para los que nos desagradan.
Oh Allah, te pedimos que nos hagas ser de los que imitan a los compañeros de Tu Rasul, sallallahu alayhi wa sallam, ésos sobre los que dice Allah en su Libro:
"Allah traerá a otros a los que amará y por los que será amado, humildes con los creyentes y altivos con los incrédulos".
Oh Allah te pedimos que nos hagas ser como ellos. Y te pedimos Allah que nos des la capacidad necesaria para poder ser misericordiosos con nuestros propios compañeros.
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