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mezquita de Granada
Imam: Hafid Ahmed Bermejo

Musulmanes, os exhorto a que tengáis Taqwa de Allah, pues ciertamente la Taqwa de Allah es una de los grandes medios para obtener la guía Divina.

Sabed que el más grande e importante regalo que Allah ha entregado a la Ummah de Muhammad, sallallahu ‘alayhi wa sallam, es la guía hacia el camino recto, y ciertamente esta guía ha de ser el bien mas buscado por el ser humano a lo largo de toda su vida.

Allah, subhanahu wa ta’ala, nos ha obligado a pedirle la recta guía en cada uno de los rakats que hacemos, ya sea obligatorio o sunna, puesto que cada vez que recitamos la Surat al Fatiha decimos: “Guíanos por el Camino Recto”.

Musulmanes, ciertamente una de las grandes prácticas con la que podemos obtener la recta guía hacia el Sirat al Mustaquim es la buena compañía. Ya que la compañía es la piedra angular en torno a la que gira la vida de la persona. Pues si esta compañía esta corrompida y contaminada, eso hará que nos lleve por los caminos de las enfermedades, la corrupción y la perdición. Y si por el contrario, la compañía es pura y limpia, estaremos a salvo de recorrer esos caminos.

Y el inteligente es el que escoge lo que le conviene y le hace mejorar como persona; en cambio el ignorante es el que elige lo que le va a perjudicar y va ser causa de su perdición y deterioro.

Y es por esto por lo que Allah ordenó al Mensajero, salla allahu alalyhi wa sallam, escoger con quien sentarse y cuales habían de ser sus compañeros cuando dice: “Y sé constante en la compañía de aquellos que invocan a su Señor mañana y tarde anhelando Su Faz, no apartes tus ojos de ellos por deseo de la vida de este mundo ni obedezcas a aquel del que hemos hecho que su corazón este descuidado de nuestro recuerdo, sigue su pasión y su asunto es pérdida”. (Kahf, 28)

Allah subhanahu wa ta’ala le ordenó tomar la compañía de los que buscan la Faz de Allah y se aplican en Su complacencia, recordándole con todo tipo de alabanzas y glorificándole día y noche, Y esto es lo que le ordenó, ya fueran esos compañeros ricos o pobres, fuertes o débiles.

Dijo el Mensajero, al que Allah colme de bendiciones: “Ejemplo de la buena o mala compañía es el del vendedor de almizcle o el que sopla con el fuelle en la fragua del herrero. El portador de almizcle te lo da a probar, y bien se lo compras o bien te queda un buen olor.
En cambio, el que sopla el fuelle, o te quema la ropa o te impregna de mal olor." (Hadiz de Abu Musa al Ash’ari mutafaqun alaih)

Musulmanes, ciertamente no hay ninguna duda de que aquel que entra en una perfumería se va a embriagar con buenos olores, y es posible que allí o bien le regalen algún perfume o que compre alguno de esos buenos olores; y si al final no ocurre ni lo uno ni lo otro, al menos se irá a su casa con el recuerdo de los buenos olores. Y lo mismo ocurre con la buena compañía del creyente, te beneficiarás siempre de él; es posible que lo encuentres recordando a Allah y eso hará que tú también recuerdes a Allah, o es incluso posible que alivie tus sufrimientos, dándote buenos consejos y guía. Y si no, al menos el mero hecho de verle te hará recordar a Allah.


Ha transmitido Ibn Abbas, que Allah esté complacido con ambos, que algunos dijeron: “¿Cuál es la mejor compañía que podemos tener?” Dijo, sallallahu ‘alayhi wa sallam: “Aquel que al verlo te recuerda a Allah, incrementa en algo tu conocimiento, o con sus acciones te hace recordar al Ajira” (Rawahu Abu Ya’la)

Y dijo salla allahu alayhi wa sallam en otro hadiz: “La persona tiene el Din de su amigo más cercano, así que fijaos de quien os rodeáis”

Musulmanes, esta es la compañía que debemos buscar, este tipo de personas son las que hemos de intentar tener a nuestro alrededor; personas que sólo con verlas nos hagan recordar a Allah, cuyos consejos nos ayuden en esta vida y nos hagan recordar el Ajira con sus acciones. Y en ellas encontraremos ayuda y sosiego en todas las adversidades que nos surjan.

Ciertamente la compañía es lo mas parecido a un espejo en el que nos miramos. En él se reflejarán las virtudes y los defectos, la maldad y la belleza. Y en la medida en que ese espejo esté limpio y sea puro, mejor nos veremos y así estaremos lejos de caer en el fraude y el engaño.

Dijo el Mensajero al que Allah colme de bendiciones, en un hadiz narrado por Abu Huraira y transmitido por Imam Bujari: “El creyente es el espejo del creyente, y el creyente es el hermano del creyente; le guarda su honor y protege su espalda”

Y que Allah esté complacido con aquel que dijo:

No preguntes por la persona, pregunta por su compañero, pues tono el que tiene un compañero sigue su ejemplo.

Dijo en una ocasión Anas Ibn Malik, que Allah esté complacido con el: “Busca los hermanos veraces y vive bajo su protección, pues ciertamente son un deleite en la facilidad y un apoyo en la dificultad”.

Le dijo un hombre a Dawud Attai: “Aconséjame” y éste dijo: “Busca la compañía de la gente de Taqwa pues ellos son de la gente de Dunia los que no te darán ningún peso, y los que te serán de más ayuda”

Y dijo Al Ahnaf Ibn Qais, que Allah esté complacido con él: “Las buenas palabras son mejor que el silencio y el silencio es mejor que las palabras banales e insulsas; y la buena compañía es mejor que la soledad y la soledad es mejor que la mala compañía”.

Se ha transmitido de Abu Musa al Ashari, radiya Allah anhu, que dijo: “La reunión en la que estaba presente Abdullah Ibn Masud, que Allah esté complacido con el, era mejor para mi que las acciones de todo un año”.

Ciertamente todo esto son ejemplos de esa buena compañía que hemos de buscar en nuestras vidas. Y cuánto necesitamos a este tipo de compañeros en nuestros días, en los que todo es distracción y olvido de nuestro Señor, cuánto bien nos haría poder contar con este tipo de gente que con sólo verlos nos hacen recordar a Allah.

Y a Allah le pedimos que nos permita tener la compañía de esa gente; y te pedimos Allah que hagas que nuestros compañeros nos hagan recordarte constantemente, que nos ayuden en las dificultades con buenas palabras y con consejos, y que sean un apoyo en el tránsito de esta vida hacia la próxima.

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Hermanos en el Islam, ciertamente el Mensajero, al que Allah colme de bendiciones, compara la mala compañía con el que sopla el fuelle en la fragua del herrero; y dice que nos va a perjudicar, bien quemándonos o con el mal olor. Y esto mismo ocurre con el que está inmerso en la desobediencia a Allah.

Su compañía sólo nos puede causar daño y ningún beneficio, un mal sin nada bueno; y si no nos perjudica con su fuego que es la desobediencia, lo hará con un mal olor que nos molestará todo el día por haber estado en su compañía.

Y Allah en Su Libro nos advierte sobre tomar la mala compañía y dejar la buena, por el mucho mal que esto puede causar. Un mal que puede ser la causa de la perdición y de entrar en el Fuego, wa na’udhu billah. Allah dice en la Sura del Discernimiento: “Será el día en que el injusto se morderá las manos y dirá: ¡Ojalá hubiera tomado un camino junto al Mensajero! ¡Ay de mí! ¡Ojalá no hubiera tomado a fulano por amigo! Me extravió del Recuerdo después de haberme venido. El Shaytán es para el hombre una decepción”. (Furqan,27)

Y esta aleya fue revelada a propósito de Uqbata Bin Abi Mu’ait, cuando tuvo dudas sobre si entrar o no en el Islam, y su amigo Ubai Bin Jalf le impidió que lo hiciera y Uqbata le obedeció. Y eso fue la causa de su perdición, de sus terribles remordimientos y de su inmensa angustia en el Yaum Al Qiyamah.

La mala compañía es un impedimento para la persona ante todo bien, y en el yaumul qiyamah le rodeará como un terrible enemigo, y se repudiarán y acusarán los unos a los otros, ya que este tipo de compañía esta basada en la desobediencia a Allah.

Dice Allah en Su Libro: “Ese día los amigos serán enemigos unos de otros, pero no así los que tengan Temor de Allah” (Dorados 66)

En el Día del Levantamiento se volverán enfurecidos los amigos cuya relación no esté cimentada en la Taqwa de Allah o en el amor, porque ciertamente verán que el mal les afectará por culpa del amigo que habían tomado en este mundo; y en cambio los temerosos observarán que el beneficio les viene por los compañeros que como él, tuvieron Taqwa de Allah.

Se ha transmitido que el Imam Ali Ibn Abi Talib que Allah esté complacido con el, definía la buena y la mala compañía diciendo: “Supongamos que hay dos amigos íntimos creyentes y dos amigos íntimos kuffar; muere uno de los dos creyentes y cuando se presenta ante Allah dice: “Oh Señor, ciertamente Fulano me ordenaba que Te obedeciera y que obedeciera a Tu Mensajero, me obligaba a hacer el bien y me prohibía el mal, y me informó que me encontraría Contigo. ¡Oh Señor, no lo extravíes y guíalo tal y como Tú me has guiado, y sé generoso con él como Tú has sido generoso conmigo. Y al morir su amigo creyente, se les reunirá a ambos y se dirá: “Que uno de vosotros alabe al otro. Y dirá uno de ellos: “Oh Señor, ciertamente Fulano me ordenaba que Te obedeciera y que obedeciera a Tu Mensajero, me obligaba a hacer el bien y me prohibía el mal y me informó que me encontraría Contigo”. Y dirá Allah: “Que excelente amigo íntimo, Que excelente hermano, Que excelente compañero”. Y al morir uno de los dos amigos kafir dirá: “Oh Señor, fulano me prohibía que Te obedeciera y que obedeciera a Tu Mensajero, y me ordenaba hacer el mal y me prohibía hacer el bien, y me informó que no me encontraría Contigo. Y dirá Allah: “Que pésimo hermano, Que pésimo amigo íntimo y Que pésimo compañero””. (Transmitido por Ibn Abi Hatim y por el Baihaqy)

Oh Allah te pedimos que nos libres de este tipo de compañía y que nos hagas rodearnos de la gente de bien, los que tienen temor de Ti y buscan Tu complacencia.

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